Perseguir tus sueños
Hace 1 año estaba sin trabajo, preocupada por mí, por mis finanzas, por mi vida profesional, pero al mismo tiempo me sentía liberada. Porque estar en un trabajo con un buen sueldo, cerca de casa, en el que no se reconoce tu trabajo, que no escuchan tus demandas, en el que las oportunidades de crecimiento son pocas y están destinadas a las personas con habilidades políticas, pero no de liderazgo, también aprisiona y desmotiva.
Uno de esos días en los que seguía sin encontrar trabajo, que me sentía preocupada porque mi dinero se acababa pero que al mismo tiempo no quería encontrar trabajo porque tenía a mi perrita de 4 meses en recuperación medica después de sobrevivir al moquillo y tener que seguir un tratamiento y cuidados en casa. Recuerdo escribir una hoja de deseos o como ahora llamamos “manifestación” mi hoja estaba compuesta por varios apartados: mi vida profesional, la personal, la social, la educativa y la de salud. Entre las muchas cosas que escribí estaba lo siguiente:
“Deseo encontrar un trabajo en el que tenga a una jefa mujer, que confié en mí, que me rete profesionalmente, que me ayude a crecer, que sea justa, líder y a quien pueda admirar. También deseo tener un equipo de trabajo colaborativo, que confié en mí, que trabajemos en equipo, que sepamos comunicarnos, que nos apoyemos, que sean personas inteligentes y leales”.
Curiosamente encontré esas hojas hoy y no pude más que leerlas y llorar, porque siento que llegue a ese lugar con esa jefa y con ese equipo. Lo más irónico es que no me quedaré en este trabajo porque encontré una oportunidad aún mejor. Y aún más increíble, es que a donde voy tendré una a una mujer de jefa inmediata y ella a su vez tiene una jefa mujer, con quien tuve la oportunidad de entrevistarme y de quien quedé más que sorprendida al conocer su CV.
Esta vez quiero compartirte esta experiencia porque estoy segura de que la vida te da aquello que deseas con todo tu corazón, no te lo da cuando lo pides, sino cuando estas lista para recibirlo, que los sueños que tienes están ahí para darte un motivo para trabajar, para buscar la forma de hacerlos realidad, que son un esfuerzo continuo. Hoy me siento sumamente tranquila y feliz de saber que eso que pedí hace un año, está disponible para mi hoy y también agradezco a la vida por brindarme estas oportunidades.
No me gustaría solo compartirte el lado bueno de esta situación, ojalá todo fuera tan fácil como pedir y recibir, no es así, estuve 6 meses sin trabajo, 6 meses en un trabajo horrible con un sueldo aún más horrible, con un mal ambiente laboral, tuve que cambiar mi estilo de vida, me endeude. Mi perrita de 2 meses de nacida contrajo moquillo, presento convulsiones, estuvo internada 3 semanas y cada día me decían los veterinarios que podría ser su último día, además tenía más o menos 4 meses de haber terminado una relación en la que cohabitaba con mi ex novio, tuve que conseguir una roome y dejé la escuela (estudiaba mi segunda licenciatura).
En ese año las únicas cosas que permanecieron fueron mi deseo de encontrar el trabajo de mis sueños y todos los días buscarlo en todas las bolsas de trabajo disponibles en internet, hacer más o menos 2 entrevistas al mes, estudiar para esas entrevistas, llorar cada vez que me rechazaban de una vacante y seguirlo intentando 1 y otra vez.
Por otro lado, tampoco fue sencillo tener claro lo que quería, incluso parecía más fácil saber lo que no quería. En este aspecto el poner atención a mis experiencias y ver como una oportunidad de aprendizaje cada una y a cada persona que me cruce en el camino, me ayudo a tener perspectiva y lucidez.
El otro factor relevante ha sido renunciar, saber renunciar a todo lo que no es lo que quiero, a lo que se parece pero que de alguna forma no es, a no conformarme y luego confiar, confiar en que iba a encontrar la oportunidad con las características que estaba buscando. La parte más difícil en realidad porque se siente como cerrar una puerta y empezar a caminar en la oscuridad.
Al final me quedo con la satisfacción de saber que hice todo cuanto podía, que estudie, que fui perseverante, que renuncie y confié y que gracias al esfuerzo de 1 año hoy estoy tranquila y agradecida porque todo lo que quería por fin está sucediendo.
Que no nos de miedo buscar aquello que deseamos, si lo deseamos es porque algo dentro de ti sabe que eres capaz de obtenerlo. Hay que aferrarnos a nuestros sueños tanto como podamos hasta hacerlos realidad o hasta darnos cuenta que realmente no eran lo que creíamos, pero igualmente intentarlo.
Con cariño Penny
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